4 años de diferencia.
Mismas ganas.
Mismo corte de pelo.
Situaciones muy distintas.
Han pasado varios años entre estas dos fotos.
Y aunque mi apariencia es casi la misma… yo ya no lo soy.
En 2021
➜ No tenía clientes estables
➜ No tenía equipo
➜ No tenía estructura
En resumen, no sabía ni por donde empezar.
Solo tenía una idea, muchas ganas y cero claridad.
Trabajaba desde mi habitación, aprendiendo a base de prueba y error y cometiendo todos los fallos posibles.
Pero cada fallo me enseñó algo.
Y cada aprendizaje me acercó a donde estoy ahora.
En 2025:
➜ Dirijo iGrowth, una agencia que ayuda a SaaS B2B a escalar a 1/10M al año.
➜ He trabajado con SaaS que hace unos años pensaría que sería imposible.
➜ Hoy tengo un equipo, procesos, clientes top y sobre todo, claridad.
Y no fue magia.
Fue tiempo, consistencia y foco.
Fueron 4 años de hacer lo que muchos no quieren hacer cuando las cosas no salen.
Y hoy, mirando atrás, lo tengo claro:
Tus resultados no se construyen por lo que dices, se construyen por lo que haces cuando nadie te está mirando.
Si me preguntas qué ha cambiado en estos 4 años…
La respuesta es simple: todo.
Excepto una cosa: las ganas de seguir creciendo.
Y tú, ¿Has cambiado en estos últimos años?

Mismas ganas.
Mismo corte de pelo.
Situaciones muy distintas.
Han pasado varios años entre estas dos fotos.
Y aunque mi apariencia es casi la misma… yo ya no lo soy.
En 2021
➜ No tenía clientes estables
➜ No tenía equipo
➜ No tenía estructura
En resumen, no sabía ni por donde empezar.
Solo tenía una idea, muchas ganas y cero claridad.
Trabajaba desde mi habitación, aprendiendo a base de prueba y error y cometiendo todos los fallos posibles.
Pero cada fallo me enseñó algo.
Y cada aprendizaje me acercó a donde estoy ahora.
En 2025:
➜ Dirijo iGrowth, una agencia que ayuda a SaaS B2B a escalar a 1/10M al año.
➜ He trabajado con SaaS que hace unos años pensaría que sería imposible.
➜ Hoy tengo un equipo, procesos, clientes top y sobre todo, claridad.
Y no fue magia.
Fue tiempo, consistencia y foco.
Fueron 4 años de hacer lo que muchos no quieren hacer cuando las cosas no salen.
Y hoy, mirando atrás, lo tengo claro:
Tus resultados no se construyen por lo que dices, se construyen por lo que haces cuando nadie te está mirando.
Si me preguntas qué ha cambiado en estos 4 años…
La respuesta es simple: todo.
Excepto una cosa: las ganas de seguir creciendo.
Y tú, ¿Has cambiado en estos últimos años?
