Siempre había dicho que Estados Unidos no me iba a impactar tanto porque el estilo de vida y la cultura es muy parecida a la nuestra.
Que equivocada estaba.
Recientemente he visitado Nueva York y por defecto profesional me iba fijando en el diseño de los comercios.
Los restaurantes no estaban diseñados para ser agradables y disfrutar de una sobremesa, estaban diseñados para llegar, comer algo rápido e irse corriendo de nuevo a trabajar. Algunos restaurantes no tenían ni sillas, tan solo una barra para comer algo rápido de pie y salir pitando.
Las tiendas eran de otro rollo. Conocían bien a su público.
Las tiendas de lujo tenían escaparates impresionantes y al entrar respirabas poder. El diseño transmitía elegancia, poder adquisitivo y exclusividad.
Otras tiendas, por ejemplo los famosos outlets, no tenían escaparates. No les hace falta. Dentro, el orden daba gusto. Nunca me ha resultado fácil comprar en outlets porque para encontrar algo tienes que rebuscar mucho. Aquí no. Tenían todas las secciones perfectamente divididas y ordenadas, por lo que la experiencia de compra era mucho más fácil y te invitaba a investigar cada sección.
Siempre digo que hay que conocer bien a tu cliente ideal antes de empezar a diseñar tu local. En Nueva York lo saben bien.
¿Qué ciudad es más consumista que Nueva York?
Así que, hagámosle caso a los neoyorquinos.
Si tienes un local comercial y estás en proceso de diseño, piensa en esto primero. No empieces comprando la silla que tanto te gusta...porque luego te quedarás con ella sin saber qué hacer. Diseña con estrategia.
Nosotras lo hacemos así.
Te dejo por aquí nuestra newsletter, donde compartimos trucos de diseño inteligente: https://calymastudio.com/newsletter/
Que equivocada estaba.
Recientemente he visitado Nueva York y por defecto profesional me iba fijando en el diseño de los comercios.
Los restaurantes no estaban diseñados para ser agradables y disfrutar de una sobremesa, estaban diseñados para llegar, comer algo rápido e irse corriendo de nuevo a trabajar. Algunos restaurantes no tenían ni sillas, tan solo una barra para comer algo rápido de pie y salir pitando.
Las tiendas eran de otro rollo. Conocían bien a su público.
Las tiendas de lujo tenían escaparates impresionantes y al entrar respirabas poder. El diseño transmitía elegancia, poder adquisitivo y exclusividad.
Otras tiendas, por ejemplo los famosos outlets, no tenían escaparates. No les hace falta. Dentro, el orden daba gusto. Nunca me ha resultado fácil comprar en outlets porque para encontrar algo tienes que rebuscar mucho. Aquí no. Tenían todas las secciones perfectamente divididas y ordenadas, por lo que la experiencia de compra era mucho más fácil y te invitaba a investigar cada sección.
Siempre digo que hay que conocer bien a tu cliente ideal antes de empezar a diseñar tu local. En Nueva York lo saben bien.
¿Qué ciudad es más consumista que Nueva York?
Así que, hagámosle caso a los neoyorquinos.
Si tienes un local comercial y estás en proceso de diseño, piensa en esto primero. No empieces comprando la silla que tanto te gusta...porque luego te quedarás con ella sin saber qué hacer. Diseña con estrategia.
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